Al promontorio del extremo suroeste de la bahía, según se había prometido, se le dio el nombre del grumete que avistó tierra neozelandesa por primera vez: Young Nick Head, por el grumete Nicholas Young. Al finalizar el partido, se produjeron unos incidentes debido a que los aficionados locales, que ya habían mostrado su descontento durante el partido, por la presencia de tres miembros de la Real Federación Española de Fútbol que se encontraban en el palco federativo.